Armonía. Es un lienzo de majestuosa belleza. Dos caballos, uno negro y otro blanco, se encuentran de pie uno al lado del otro en un campo de flores silvestres. Sus pelajes brillan bajo el sol de la mañana, contrastando con los colores vibrantes de las flores. Los caballos están en perfecta armonía, sus cabezas inclinadas una hacia la otra como si estuvieran compartiendo un secreto. Sus ojos, llenos de inteligencia y serenidad, reflejan la belleza del paisaje que los rodea.
La pintura se realiza con una mezcla de óleo con espátula, capturando la textura y la forma de los caballos con gran detalle. El óleo se utiliza para crear una base sólida, mientras que la espátula se utiliza para añadir detalles y profundidad. Las pinceladas son suaves y fluidas, creando una sensación de movimiento y ligereza.
Los caballos se colocan en el centro del lienzo, ocupando la mayor parte de la composición. Sus cuerpos están en perfecta simetría, creando una sensación de equilibrio y armonía. Las flores silvestres enmarcan a los caballos, creando un marco natural para esta escena pastoral. El fondo es un cielo azul claro, salpicado de nubes blancas, que aporta una sensación de amplitud y serenidad.
«Armonía» es una obra de arte que invita a la reflexión y a la contemplación de la belleza natural. Es un recordatorio de que la fuerza se encuentra en la unión y que la amistad puede superar cualquier obstáculo.